Victor Alberto Bueno Marichal: La CryptoBanca Centralle (CC) La lástima de los bots

La CryptoBanca Centralle (CC) La lástima de los bots

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Muy lejos del mar, que es como otro mundo en el que solo somos intrusos, en una pequeña ciudad de un país montañoso y discreto hay un banquito llamado CryptoBanca Centralle (CC) que solo ocupa los primeros tres pisos y los sótanos de un edificio de cinco pisos.

El cuarto piso de ese edificio esta subdividido en cubículos donde trabajan especialistas en computación que pertenecen a una empresa que muy pocos saben por qué se llama DeltOr AG.

En el único ascensor la etiqueta para seleccionar el piso no dice cinco, sino: Dirección.

Si alguien pregunta que hay en los sótanos, le dirán que el edificio no tiene estacionamiento, que las bicicletas hay que dejarlas en la plaza que queda cincuenta metros antes, que la calle está cerrada al tráfico vehicular, y que en los sótanos quedan el centro de datos y la bóveda, y si uno es preguntón y pregunta algo de la bóveda te dirán que ocupa tres sótanos y que solo guarda oro, porque ese banco no trabaja con dinero físico, y que lo más valioso son los equipos del centro de datos. También te dirán que es más fácil que te dejen entrar a la bóveda que al centro de datos. Y si se te ocurre preguntar algo más vas a obligar a la persona que estás interrogando a formular una denuncia formal por acoso ante la policía. No importa si esa persona trabaja o no para DeltOr o la CC, porque es una ley del país.

Es del dominio público que el oro que está en la bóveda de la CC está en lingotes de un kilo que vienen de la planta de refinación que está en las afueras de la ciudad, y que continuamente se despachan al centro de acuñación para ser convertidos en las famosas gold-tokens de cien gramos que son almacenadas en cajas personales y despachadas desde centro comercial de la CryptoBanca Centralle en T’zurig.

Demás está decir que la calle donde está la sede principal de la CC está cerrada al tráfico vehicular de día, y que de noche es incesante el tráfico de vehículos de carga blindados.

La criptomoneda con que trabaja la CC se llama CC-token.

¿Cuál es el valor nominal de un CC-token? Exactamente un gold-token, aunque debido a que son virtuales y tienen muchas ventajas sobre el oro físico, en el mercado se cotizan a precios más altos, de todos modos la CC garantiza un gold-token por cada CC-token que se deseé cambiar en las taquillas de su centro comercial.

Algo raro en el negocio de la CC es que si yo les llevo un kilo de oro ellos no me van dar diez gold-token, porque en estos momentos un gold-token vale el equivalente a cero cuarenta kilos de oro. ¿Por qué? Porque eso es lo que se está pagando en el mercado por tener cien gramos de oro anónimamente en el centro comercial de la CC fuera del alcance de los recaudadores de impuestos y de la policía de los demás países. Y si me pongo muy preguntón con cualquier trabajador de la CC lo estoy obligando a denunciarme formalmente ante la policía por sospechas de contrabando de oro.

Más raro aún es que en estos momentos en el mercado un CC-token vale tres gold-tokens, eso no necesito preguntárselo a nadie. Mucha gente cree que es porque la publicidad en la realidad virtual sintética mejorada le ha grabado en el cerebro a mas del 94.23% de la población mundial el slogan “Mejor que el oro” y lo tenemos asociado con todo lo relacionado con la CryptoBanca Centralle (CC), el ÉXITO, el poder, el lujo, y las parejas bellas.

Pero la verdad es que son innegables las ventajas de uso anónimo, demostración irrefutable de propiedad, y uso electrónico de las monedas virtuales.

En resumen, poder atesorar o comprar con una moneda de valor nominal de cien gramos de oro sin que nadie sepa que fuiste tú, y desde cualquier parte del mundo usando un asistente personal cuesta 3*0.40=1.2 kilos de oro “normal”.

¿Quien va a ser tan estúpido de pagar casi de un kilo de oro por un certificado por cien gramos de oro almacenado en un computador? La CC nos dice que son la gente más bella, exitosa y poderosa, y yo le añadiría también que peligrosa.

Me encanta cuando me preguntan en las aduanas que si tengo dinero que declarar, mientras cargo en mi bolsillo, en mi asistente personal (replicados mi almacenamiento central) certificados que valen toneladas de oro. Siempre respondo con la verdad. No tengo dinero que declarar, porque trato de no usar dinero físico.

¿Por qué estoy contando todo esto? Porque me han contratado para comprar mil doscientos treinta y dos gold-tokens y mi cliente los quiere en físico.

Mil doscientos treinta y dos gold-tokens cada uno pesando cien gramos pesan un poco más de ciento veintitrés kilos, no los puedo llevar como equipaje, de hecho no soy capaz de moverlos. Tengo que contratar ayuda.

Tendría que estar loco para querer comprarle a la CC 1,232 gold-tokens con CC-tokens porque me costarían 1,232 CC-tokens.

Comprar 1,232 gold-tokens con oro es venderles los 1,232.0 * 0.40 = 492.8 kilos que le compré a una comercializadora de minerales del grupo DeltOr y me costaron aproximadamente 492.8 / 1.15 =428.521 CC-token porque me los recibieron a 1.15 kilos de oro por CC-token.

¿Qué va hacer la CryptoBanca Centralle (CC) con los 492.8 kilos de oro que les llevé? Seguramente 492.8 *10 = 4,928 gold-tokens de 100 gramos cada una, que van a respaldar la emisión de 4,928 CC-token “cuando la CC lo considere apropiado observando las condiciones del mercado y en beneficio de sus clientes”.

¿Que va hacer mi cliente (que es mi suegra) con sus 1,232 gold-tokens? Me dijo que un proyecto de la Iglesia Unificada del Profeta (IUP).

¿De dónde sacó mi suegra los 450 CC-token que me dio para que le hiciera la compra? Se los dio la IUP

¿Cuanto me gasté? 443.5 CC-tokens que al 10% de comisión acordado serían 44.35 CC-tokens, pero solo me dio 6.5 argumentando que me excedí en los costos, y que el presupuesto era de 450 CC-tokens.

¿Cómo empezó todo esto?

En el libro de actas del profeta que leemos en el curso introductorio 101 de la Verdadera Iglesia de Dios (VID) consta que:

El profeta y su pupilo almorzaban pollo frito al frente de una pared llena de gráficos.

--¿Por qué está creciendo tan lento? Preguntó el profeta.

--Algunos proveedores de equipos nos suspendieron las entregas por atraso en los pagos—respondió el pupilo.

--Compra al más grande en cada ramo.

-- ¿Con qué dinero?

-- Crea una moneda

--¿Con qué la respaldo?

--Con oro

--De donde lo saco

--Pídelo prestado.

--¿Cuánto?

---Tres toneladas para arrancar está bien.

--¿Cómo avalo ese préstamo?

--Funda un banco.

--¿Tienes un nombre y un lugar pensado?

-- No lo fundes en Italia, pero ponle un nombre que suene a italiano. No uses la palabra Ponzi.

--Tienes candidatos para la junta directiva

-- Tú y coloca como asesores a los presidentes de las empresas que compres, mete a alguien del gobierno que trabaje con impuestos, aduanas y cosas así.

No hace falta que renuncien a sus actuales empleos.

De la campaña publicitaria me encargo yo.

Li Tao Po

VABM 19/Jul/2022

https://riistas.wordpress.com/2022/07/22/la-cryptobanca-centralle-cc-la-lastima-de-los-bots/

https://riistas.files.wordpress.com/2022/07/lacryptobancacentralle28cc29lalc3a1stimadelosbots.pdf

Desde aquí se puede descargar una muestra de La Lástima de los Bots

https://riistas.files.wordpress.com/2022/07/introduccic3b3nalalc3a1stimadelosbots-2.pdf

La Lástima de los Bots

https://www.amazon.com/dp/B0B9HH58R4

Este texto continúa la saga del:

Tratado de las buenas costumbres y virtudes de los marcianos