Un sábado olvidado
Mi hijo caza bachacos
Y persigue esferas
Con complicidad de muchachos
Les tiramos piedras a los pájaros
Antes yo era el amor de mi amada
Ahora espero, impaciente, que se duerma
El fruto de nuestras peleas
Y reencuentros
En mi esquina favorita
De la cama duerme
El que con un suspiro
La despierta alarmada
Yo he llegado a codazos y patadas
Al lado de la cama
Nos abochornan con su gordura
Las amadas
La alfombra pica en la espalda
Espero despertarme tarde
Para comprarle cambures a mi hijo
Empanadas a mi amada
Cachitos a mi otra hija
Que también está abandonada
Pasamos de moda
Hubo movida de mata
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